Pasando el rato

Me aturde vivir al máximo… o vivir al límite, o vivir pensando en ¡debo hacerlo!, pero si es de otra forma todos creen que estoy desperdiciando mi vida… A mí me gusta vivir, solo no veo la necesidad de etiquetar este año como, !nuevos retos¡, !año decisivo¡ o al !límite¡, y al final ¿Al límite de qué? Si viviera en Tijuana, tuviera un grupo norteño o tuviera 99 años sería el más gustoso de decir… Vivo al límite! No me gusta hablar de lo que me pasa… ¡Porque no pasa nada ¡ ¡Nunca pasa nada…¡ y lo que llega a ocurrir, es un secreto que la vida comenta solo para mí. Me gusta mi cama, ¡alta! por que en las alturas mis hermanos no molestan y canito no alcanza, llena de azul, por que el azul no pasa de moda y esa es mi nube privada. Me gusta mi cuarto, porque cada rinconcito grita Carlos y si cambio los muebles o decoro algo nuevo es porque yo cambio, cuelgo nuevos recuerdos y trato de no olvidar los otros. Me gusta el futbol y lo único que disfruto más que un golazo del 10… es el aguafiestas que deja mudo a medio estadio por qué decidió proteger la frontera que reparte victorias y derrotas. Y me gusta ser ese aguafiestas los domingos por las noches y cuidar ese límite, ¡vaya ahora lo entiendo!, después de todo si vivo al límite.