Y luego... ¿Que vendo?

En mi vida profesional y he personal he tenido muchos maestros que han tratado de enseñarme diferentes cosas de la vida, algunas interesantes, otras enseñanzas parecidas a males forzosos pero en general salvo algunas contadas excepciones siempre puedes aprender algo de alguien.

El día de ayer de manera muy curiosa recibí una lección de economía quizá una de las mejores que he tenido. Por causas propias del trabajo tuvimos que ir a comprar 20 litros de agua destilada, al no encontrarla en una presentación pertinente decidimos entrar a Wal-Mart y comprar 10 botes de 2 litros de agua para plancha. Tomamos un carrito y comenzamos a arrojar en él los 10 botes que necesitábamos, que justamente eran los últimos 10 botes del mostrador. Una vez con nuestro carro lleno de agua destilado mi parte previsora hizo acto de presencia y sugerí, “Deberíamos llevar dos más” siempre hace falta… mi jefe estuvo de acuerdo y le pedimos a un joven que atendía si nos podía conseguir 2 botes más de esa agua. El joven nos miró muy extrañado y dijo, permítanme tantito mientras se alejaba de nosotros rumbo a la bodega. Dos minutos pasaron cuando llego el joven con el que pensamos era su supervisor y nos dijo “No puede llevarse todos los botes”, ¿Por qué no? Le preguntamos… Se los llevan todos, ¿y luego yo que vendo? , mi jefe y yo nos volteamos a ver mientras nos reíamos y suponíamos que todo era una broma. Nos encaminamos hacia la caja para pagar los botes que ya teníamos en el carrito mientras nuestros amigos con el chaleco azul nos seguían diciéndonos “Le voy a hablar a seguridad” y demás amenazas que nunca entendimos a que se debían. Al llegar a la caja el amigo del chaleco azul le dijo a la cajera “No les cobres nada no se lo pueden llevar” Ella hizo la pregunta que todos habíamos hecho… ¿Por qué no? “Es que son todos los que tenemos y si se los llevan ¿luego que vendemos?”, la cajera por supuesto se hecho a reír y empezó a pasar los artículos por la banda mientras nuestro amigo del chaleco azul indignado por la respuesta de la cajera fue por quien nos pareció el gerente de la tienda.

¿Cuál es el problema? Llego diciendo, No tuvimos tiempo de decir nada cuando el amigo del chaleco azul dijo, “Es que son todos los botes de agua que tenemos y si se los llevan ¿Luego que vendemos?” El gerente por su puesto soltó una risa ligera y nos dijo “Ven lo que tengo que aguantar” nos pidió disculpas y tomo del hombro al señor del chaleco a amarillo y le dijo “Ven, tenemos que hablar”
En camino a la planta mi jefe y yo nos reíamos de lo acontecido y terminamos hablando de flujos de dinero y reactivación económica, el ayudante que iba con nosotros (el que cargo las botellas), quien no había dicho nada hasta el momento dijo “Yo no entiendo como sirve que el dinero circule” mi jefe trato de explicar con una historia que se me hizo bastante interesante, obviamente omitiré palabras altisonantes y sobre nombres vulgares.

“Imagínate que llega un hombre a un hotel y como no está convencido de las habitaciones quiere entrar a ver una, el encargado del hotel le dice que para ver la habitación tiene que dejar 200$ en prenda que le regresara cuando el regrese al lobby, el cliente acepta deja los 200$ y sube a la habitación. El encargado del hotel mientras espera a que baje el señor utiliza esos 200$ para darle cambio a otro cliente, quien utiliza esos 200$ para completar el pago pago de la señorita que le prestó sus servicios la noche anterior, la señorita le da esos 200$ al policía ya que son su cuota por dejarla pasar, y finalmente el policía le paga al hotel 200$ que le debía al patrón. Finalmente el señor que estaba viendo los cuartos baja y como no le pareció agradable el hotel recupera su dinero y se va. ¿Te imaginas el problema que hubiera habido si él no hubiese querido dar los 200$ en primer lugar?”
El ejemplo pro supuesto es considerablemente infantil y se podría utilizar en un libro de texto gratuito de la nación “lejitima del peje” pero si uno logra analizar correctamente la historia en realidad si explica mucho de la economía y el flujo de dinero.

Mientas me encontraba en España pude hablar poco más de 10 minutos con Ferrán Soriano vicepresidente económico del club Barcelona y me quedo muy grabado algo que él decía, “Hacer pronósticos en la economía actual es complicado, y más si los hacemos a futuro”

Nos vemos el siguiente martes.

¿Por qué escribo solo los martes?, se me acaban los temas… y luego ¿Qué escribo?